¡Rutina efectiva antiacné! Cómo mantener una piel libre de imperfecciones

El acné es muy común en la adolescencia por los cambios hormonales, pero también se vuelve más frecuente en la edad adulta por motivos como la contaminación, el embarazo, la menstruación, el estrés o la sudoración excesiva. Si tu piel es propensa al acné, seguir una rutina de cuidado con los productos e ingredientes correctos te ayudará a mantener tu piel libre de imperfecciones.

La aparición del acné se debe principalmente a la obstrucción de los poros de la piel. Esta obstrucción puede ser causada por la producción excesiva de sebo o por la acumulación de células muertas, por ello la limpieza es primordial. Empecemos por este paso:

1. Limpia tu rostro por la mañana y antes de dormir, ¡siempre!

Mantener tu piel limpia impedirá que los poros se obstruyan. También deberás limpiar tu rostro después de hacer deporte o después de momentos que ocasionen sudoración excesiva. Al limpiar tu piel trata de hacerlo con mucha delicadeza y no frotes con fuerza, esto ayudará a evitar la irritación y a que aparezcan menos imperfecciones. También ten cuidado al retirar el producto, al secar hazlo con una toalla limpia y con suavidad, sin apretar ni arrastrar.

Cómo elegir el limpiador ideal: Elige limpiadores con ácido salicílico o ácido glicólico. Estos ingredientes ayudan a destapar los poros, reducir el tamaño de las espinillas y controlar la aparición de nuevas imperfecciones. Penetran los poros y eliminan células muertas, la grasa y las bacterias.

Nuestra recomendación: Salicylic Cleansing Gel de M.A.D Skincare

2. Exfolia una vez por semana

No lo hagas tan seguido, una vez por semana es perfecto. Exfoliar tu piel proporciona una limpieza profunda de la epidermis y ayudará a que la piel se renueve de manera natural. También existen exfoliantes dermatológicamente testados  y diseñados especialmente para tratar el acné y que puedes usarlo diario, sin embargo, siempre pon atención en las recomendaciones de uso.   

Cómo elegir el exfoliante ideal: Elige exfoliantes suaves; de consistencia en espuma o en loción para evitar la irritación de la piel.

Nuestra recomendación: Exfoliating Cleanser de Medicalia

3. ¡Hidrata! Tener piel grasa no te exenta de este paso

Olvida el mito de que la piel grasa no necesita hidratarse. Es falso que una crema hidratante sólo contribuye a aportar grasa a la piel, todo lo contrario, aplicar una crema hidratante especial para piel grasa te ayudará a crear un efecto matificante y a controlar la cantidad de sebo que produce la piel. 

Cómo elegir el hidratante ideal: Elige hidratantes de textura ligera y, muy importante, que sea especial para piel grasa.

Nuestra recomendación: Breakout Control Daily Moisturizer de M.A.D Skincare

4. Sí o sí, ¡protección solar!

El bloqueador solar es la clave para la piel con tendencia a acné. Es importante elegir el protector solar correcto, de lo contrario se corre el riesgo de tapar los poros y provocar la aparición de más granitos. La falta de protección solar hará que las heridas de acné acaben dejando manchas como si se tratará de cicatrices, además de estar expuesta al resto de riesgos ocasionados por los rayos UVA/UVB como el envejecimiento prematuro o daños más graves como el cáncer de piel.

Cómo elegir el protector solar ideal: Elige protectores solares con ingredientes como el óxido de zinc, que ayuda a regular la secreción sebácea. Es muy importante que sea cosmedogénico y oil-free, para evitar que tape tus poros.  

Nuestra recomendación: Tizo 3

5. Nunca están de más uno tips

• No dejes que tu pelo caiga sobre tu cara ni que tenga contacto con la piel, el sebo y la suciedad en el pelo provocan acné.
• Limpia tu rostro después del cabello, muchos productos para el cabello contienen ingredientes que pueden ocasionar granitos
• ¡No los toques! Lo sabemos, es mucha tentación, pero evita tocar los brotes. Si lo haces, esto sólo provoca expandir las bacterias o dejar cicatrices
• Almohada libre de bacterias. Cada noche tu piel tiene contacto con una combinación de suciedad, bacterias y piel muerta que llega a acumularse  en tu almohada, ¡cambia la funda con regularidad!